La desmatitis atopica es una enfermedad crónica de la piel, también denominada eczema atópico, que suele desencadenarse en brotes y cuyos principales síntomas son un picor intenso o prurito (incluso, es muy difícil evitar el rascarse), sequedad, y áreas descamadas.
Puede aparecer a cualquier edad, y se estima que en un 60% de los casos aparece el primer año de vida. Puede prolongarse y durar hasta la adolescencia y a veces toda la vida.
El principal síntoma que hemos mencionado antes es el eczema, una irritación de la piel, de coloración roja, que pica y exuda (salida de líquido al exterior). Pueden aparecer placas de piel engrosada que pican mucho.
En bebés, predominan los eczemas húmedos mientras que en niños y adulltos las lesiones son más secas y descamantes.
Cuidados cosméticos diarios:
* Limpieza de la piel una o dos veces al día, preferentemente por la noche con cremas y leches limpiadoras adecuadas a este tipo de piel.
* Tonificación con lociones suaves y equilibrantes.
* Utilización de cremas hipoalergénicas.
* A la hora de realizarse el peeling, evitar las zonas más sensibles. Aplicarse una mascarilla calmante una o dos veces por semana.
* Los geles de ducha y champús no debes contener sustancias detergentes químicas y los ingredienets deben ser naturales y ecológicos.
Otros consejos:
* Evitar que la ropa que está en contacto con la piel sea de lana o fibras sintéticas. Siempre debe ser de algodón o seda (aconsejamos 100% orgánico).
* Se aconseja lavar la ropa con jabón no detergente. No utilizar lejía. Aclarar la ropa muy bien para evitar restos de jabón.
* En la alimentación, no ingerir alimentos picantes o muy especiados o condimentados.
* Evitar los cambios bruscos de temperatura y los ambientes excesivamente caldeados o excesivamente fríos.
* La sudoración suele acentuar el eczema.
* El estrés puede también contribuir al agravamiento del problema.
* Los baños con agua de mar suelen ser muy beneficiosos.
Fuente – Mas información: Citrusparadise